Martí de Riquer, a la izquierda, y Eduardo García de Enterría, personalidades reconocidas por la UIMP

La Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) quiere expresar su profundo pesar por la doble pérdida del gran jurista y renovador del Derecho Público durante la Transición Eduardo García de Enterría, y del erudito medievalista Martí de Riquer, catalán volcado en la investigación y la difusión de la literatura y la cultura españolas. Ambos, figuras de primera magnitud en sus respectivos campos de estudio, eran académicos de la RAE y habían sido galardonados con el Premio Internacional Menéndez Pelayo en los años 2006 y 1990, respectivamente.

Eduardo García de Enterría (Ramales, Cantabria, 1923) recibió este reconocimiento de la UIMP "por su larga y brillante trayectoria intelectual y su fecundo ministerio", en palabras del jurado, que destacó su condición de "español con doctorados honoris causa en todo el mundo". El jurista, académico de la Real Academia Española (RAE) desde 1993, cuando fue elegido para la "silla U", acogió el galardón como "un exceso de benevolencia y de amistad por parte de proponentes y del jurado".

La vida de este prestigioso abogado cántabro está jalonada de relevantes hitos: Enterría fue el primer juez español del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo entre 1978 y 1986, labor que compaginó con la labor de asesoramiento a los gobiernos de Unión del Centro Democrático (UCD) y del PSOE. Fundamentales fueron sus aportaciones para el desarrollo del Título VIII de la Constitución de 1978 que rige la ordenación territorial del Estado. También recibió el Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales en 1994 y la Gran Cruz de Alfonso X El Sabio, entre otros reconocimientos.

El medievalista y filólogo Martí de Riquer (Barcelona, 1914) era el académico más veterano de la Real Academia Española, en la que ingresó en 1965 para ocupar el sillón H. Nieto del artista y escritor modernista Magí Morera i Galícia destacó por sus trabajos dedicados al Quijote y a la literatura de la Edad Media con libros como "Los trovadores", "Para leer el Quijote", "Estudios sobre Amadís de Gaula", "Aproximación a Tirant lo Blanc" o "La leyenda del grial y temas épicos medievales". Como Enterría, también recibió el Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales en 1997. Dio clases de literatura medieval al rey Don Juan Carlos cuando aún era príncipe y fue senador por designación real en 1977.

Martí de Riquer fue catedrático de Historia de las Literaturas Románicas en la Universidad de Barcelona (UB) y la Autónoma de Barcelona entre los años cincuenta y setenta. Entre 1963 y 1996 presidió la Academia de Buenas Letras.